Algunos niños abandonan la chupándose el dedo en el segundo o tercer año de vida, otros continúan haciéndolo en ocho años, y algunos - incluso a una edad avanzada. La mayoría de los expertos coinciden en que cinco años no es mucha presión sobre el niño, por lo que abandonaron el hábito. La mayoría de los niños de esta edad lanza hábito de chuparse el dedo por su cuenta sin ser recordado por los ancianos.
Chuparse el dedo - efectos normales e incluso beneficiosos para los niños pequeños: la sede y entretiene. Más de las tres cuartas partes de los niños se chupan el dedo en el primer año de vida. Por lo general recurren a esto cuando aburrido, cansado o molesto. A menudo se puede ver cómo el niño se chupa el dedo a la vez y tira de la manta, haciendo girar un mechón de pelo detrás de la oreja y tiene - todo esto por un completamente funcional.
Incluso si el hábito de chuparse el dedo persiste después de la infancia, rara vez es una buena razón para preocuparse.
No es una señal de que el niño tiene serios problemas emocionales, o que se chupa el dedo, como maleza.
Al llegar a la edad de despiadada
A medida que el logro de los niños en edad preescolar pulgar filas de succión comenzará a diluirse. Sin embargo, uno de cada cinco niños en esta edad sigue chuparse el dedo después de su quinto cumpleaños. Esta edad despiadada cuando los niños comienzan a bromear entre sí. Los padres están empezando a preocuparse de que el hábito de chuparse el dedo puede causar problemas de comunicación de un niño. Ya en el jardín de infantes, se puede ver como los niños no quieren jugar, e incluso para sentarse al lado de un niño que se chupa el dedo.
El hábito de chuparse el dedo también puede causar problemas dentales. Si el niño continúa chuparse el dedo, después de cinco años, cuando empiezan a crecer los dientes permanentes, se puede desarrollar una maloclusión
La maloclusión: solución nunca es demasiado tarde
. La consecuencia de ello son a menudo los defectos que también pueden causar dificultades en la comunicación y en el futuro los problemas psicológicos.
Pulgar prolongado hábito de succión a veces provoca la aparición de callosidades, grietas en la piel y el desarrollo de una infección debajo de las uñas. Debido al dolor a menudo los niños comienzan a chupar los dedos con más frecuencia.
Apoyos
Si el niño no dejaba de chupar su dedo pulgar para 5-6 años, los padres tiempo para pensar acerca de qué hacer con él. Antes de proceder a las exhortaciones y otras medidas, es necesario entender cómo hábito profundamente arraigado. ¿Con qué frecuencia un niño se chupa el dedo, y en cuya presencia? Si él lo hace justo antes de irse a la cama
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o cuando un miembro cercano de la familia, el problema es menos grave que si se produce en el jardín de infancia y en otros lugares donde se puede observar por los forasteros.
Los intentos de persuadir a un niño a dejar el hábito puede encontrar resistencia si no va a contar con el apoyo y el manejo del paciente. No ridiculizar al niño y no le amenazan, y no tirar de su dedo de su boca usted mismo. Estas acciones conducirán a la confrontación, y el niño puede no querer hacer lo que dices sólo porque la acción agresiva casi siempre provoca una reacción.
La mayoría de los niños mayores de cinco o seis años realmente quieren dejar de chupar el pulgar, sólo necesitan ayuda.
Plan de tratamiento simple
Abandona el hábito será mucho más fácil si el niño va a hacerlo voluntariamente. Muchos padres tienen éxito mediante el uso de un enfoque sencillo es incluir al niño en el proceso.
En primer lugar, introducir una moratoria de un mes en la discusión de este problema. Si antes de cada día de actividad (o incluso agresivo) trataron de convencer al niño a dejar de chuparse el pulgar, durante un mes, durante el cual ni siquiera se refirió a la resistencia desvanece. Y luego comprar un pedazo grande de papel, pegatinas, y hacer una "mesa de progreso". Dar un premio por cada semana que el bebé no se chupan el pulgar, y el premio mayor - si tendrá una duración de un mes. Deje que el niño toma parte activa en todo el proceso, incluyendo la elaboración de reglamentos. Por ejemplo, decidir juntos cómo muchos "fallos" pueden ser por una semana, para mantener las posibilidades de recibir un premio. Deje que su hijo elija el color de las pegatinas y pegarlas a la mesa.
Puede ser útil para ungir una uña (no el dedo) medios amargos especiales, como un recordatorio adicional de que el niño no debe chuparse el dedo; especialmente recomendado para manchar el dedo en la noche, como en un sueño controlado por muy poca acción. Sin embargo, hacerlo solamente el consentimiento del niño, después de explicar a él el nombramiento de un agente amargo. También puede usar perfume - deja un sabor amargo en la uña, pero es perfectamente seguro. Anime a su hijo a elegir lo que el perfume que va a utilizar para este propósito.
En la mayoría de los casos para superar el hábito de chuparse el dedo de manera que se necesita seis semanas a varios meses.
Los dentistas también pueden ayudar
Todo el tiempo que un niño está luchando con un hábito, debe apoyarla y alabanza. Jugar juntos en un nuevo juego, ir a un lugar interesante, a menudo abrazo del niño. Encuentra empleo en situaciones en las que la probabilidad de un retorno a la costumbre, especialmente alto - por ejemplo, cuando un niño está viendo la televisión, o cuando están viajando juntos en el coche. Por lo tanto, se puede ver la televisión al mismo construir algo con bloques de tiempo, y en el coche - un libro lleno de imágenes.
Si estos métodos no ayudan, no se preocupe.
Deshacerse de la costumbre de los niños no es menos difícil que los adultos.
Hable con su dentista - se puede recomendar un dispositivo especial que se coloca en la boca y no dar al niño chupe el pulgar.
Si aun eso no ayuda, es necesario tener en cuenta la probabilidad de que chuparse el dedo a su hijo es un signo de problemas más profundos. En este caso, usted debe consultar a un especialista en trastornos mentales.